Algunos expertos recuerdan que este tipo de conceptos de construcción "pasiva", "ecológica", "bioclimática", o "de energía cero" se pueden interpretar de diversas maneras. En el caso concreto de las "casas pasivas" hay quien diferencia entre el calificativo "pasivo", más genérico, para atribuirlo a construcciones que utilizan alguno de estos sistemas para ahorrar energía, y los estándares de "casa pasiva" que certifican una serie de normas para lograr edificios con bajo consumo energético.
En definitiva, a la hora de levantar una de estas viviendas, o de incluir alguno de estos sistemas en un edificio ya edificado, conviene asesorarse con un buen profesional que cuide los detalles y sospechar de promesas demasiado idílicas. Lo mejor sería que este experto realizara un estudio previo de las condiciones climáticas del lugar donde se ubicará el edificio y dominara los diferentes sistemas y materiales que se fueran a emplear. Para ello, se pueden utilizar simulaciones informáticas específicas y conjugar de la manera más óptima y económica la gran variedad de técnicas y tecnologías disponibles. Por ejemplo, no sería válido el diseño de una casa pasiva pensado para el frío clima alemán en una zona del Mediterráneo, donde el sistema sobrecalentaría la vivienda. En este caso, habría que pensar en conjugarlo con un buen sistema de refrigeración.
Por otra parte, la orientación del edificio es clave, porque permitirá aprovechar el sol lo mejor posible. Asimismo, los sistemas pasivos se basan en principios físicos para captar y acumular el calor solar. Las posibilidades son muy diversas: superficies vidriadas orientadas en función de las necesidades de calor del edificio; muros Trombe para mejorar la captación de la luz solar y muros de acumulación ventilados para facilitar el intercambio de calor; techos de acumulación de calor; colectores solares de aire o agua caliente para acumular el calor; materiales superaislantes y transpirables para las paredes y el techo; ventanas de tecnología pasiva; sistemas eléctricos y de iluminación de alta eficiencia, etc. Y a la inversa, se pueden usar diversos sistemas de refrigeración pasiva para los días calurosos. Por otra parte, para cubrir posibles carencias puntuales, se pueden utilizar sistemas de energía renovable domésticos, como paneles fotovoltaicos o térmicos.